Vermiculita
La vermiculita forma parte de la familia de los minerales naturales y se forma por la hidratación de ciertos minerales basálticos. Tiene un tono brillante particular que va del gris oscuro al plateado dorado. Posee propiedades de expansión cuando se somete al calor y se utiliza principalmente bajo la forma exfoliada.
La vermiculita es un mineral utilizado por su resistencia térmica y acústica.
La vermiculita llamada cruda (no exfoliada) posee una masa volúmica de cerca de 2,6 que desciende entre 0,8 y 1,2 después de la exfoliación.
Completamente incombustible e imputrescible, es un material natural, ecológico y extremadamente duradero. Resiste perfectamente a los roedores e insectos.
La vermiculita puede considerarse como inalterable a lo largo del tiempo.
La vermiculita ofrece resistencia térmica, aislamiento acústico y protección pasiva contra incendios para sus estructuras
Es necesario un tratamiento térmico para darle a la vermiculita sus propiedades aislantes.
La vermiculita se utiliza en las construcciones nuevas y en la renovación, como aislante térmico y acústico, pero también como revestimiento destinado a la protección pasiva contra el fuego. Puede servir para el aislamiento de desvanes, suelos o paredes verticales huecas. La vermiculita es muy ligera lo que hace que sea ideal para las superficies de soporte frágiles. Proyectada, permite tratar zonas de difícil acceso, en paneles permite una instalación fácil sobre los muros y tabiques.
La vermiculita es resistente a un calor muy elevado, su punto de fusión se sitúa en 1.350°C.
Está clasificada A1 en términos de resistencia al fuego, razón por la cual se utiliza en la protección pasiva contra incendios.
No es sensible a las variaciones de temperatura ni al vapor del cual absorbe la humedad, además no es soluble en agua, no está sujeta a la descomposición, lo que le confiere una vida útil casi ilimitada.